LA REPRODUCCIÓN HUMANA

Importancia de la reproducción. La reproducción humana es un proceso natural y normal muy importante, ya que permite la multiplicación de la especie humana. Sin la reproducción la especie humana desaparecería. Por otra parte, muchas parejas consideran deseable e importante tener los hijos que puedan cuidar y amar. La presencia de los hijos parece dar un bienestar emocional y psicológico a muchas parejas.  La responsabilidad de la reproducción. La reproducción debe ser tomada con seriedad y responsabilidad, pues, de lo contrario, podría traer consecuencias lamentables para los padres y para el nuevo ser. Para tener y atender un hijo es necesario la madurez biológica y psicológica de los padres. Esto garantizará que los progenitores puedan desempeñar con éxito tan importante tarea. Los padres deben ser capaces de satisfacer las necesidades básicas de sus hijos: asegurarles una vivienda adecuada, alimentación balanceada, vestido suficiente, educación, etc. De igual modo es fundamental que los padres garanticen a sus hijos la satisfacción de sus necesidades afectivas y espirituales. La formación integral de los futuros padres es, entonces, muy importante. Por eso, la decisión de tener un hijo no debe ser tomada a la ligera. Debe ser pensada, meditada y reflexionada tanto por el futuro papá como por la futura mamá. Traer un niño al mundo exige muchísima responsabilidad para hacer de él un ciudadano querido, respetado y desarrollado física, mental, moral y espiritualmente.  EL APARATO REPRODUCTOR HUMANO El aparato reproductor femenino. El aparato reproductor femenino está formado por los ovarios, las trompas de Falopio, el útero, la vagina y la vulva. Los ovarios son dos glándulas que producen los óvulos o células sexuales femeninas. Las trompas de Falopio son dos conductos que comunican los ovarios con el útero. Tienen como función trasladar el óvulo hasta el útero. El útero, llamado también matriz, es un órgano muscular hueco en forma de pera donde se aloja el óvulo fecundado durante el embarazo. La vagina es un conducto o canal musculoso y elástico que comunica el útero con el exterior. La vulva es el órgano genital externo femenino formado por repliegues de piel llamados labios. El aparato reproductor masculino. El aparato reproductor masculino está formado por los testículos, los conductos deferentes, las vesículas seminales, la próstata y el pene. Los testículos son dos glándulas que producen los espermatozoides o células sexuales masculinas. Los conductos deferentes son dos tubos circulares que transportan el semen y comunican los testículos con el pene. Las vesículas seminales son dos glándulas que producen un líquido llamado esperma o semen donde los espermatozoides son transportados. La próstata es una glándula que produce un líquido que estimula el movimiento de los espermatozoides. El pene es el órgano genital externo masculino que permite la salida de orina o de semen a través de la uretra.    LA FUNCIÓN SEXUAL Y REPRODUCTORA La función sexual.  Los cambios que se inician en la pubertad indican que tanto el hombre como la mujer tienen una función sexual que permite dar inicio a la función de reproducción, al igual que los animales y la mayoría de las plantas Además de la aparición de los caracteres sexuales secundarios en el hombre y la mujer, durante la pubertad también se inicia una etapa psicológica y emocional en la cual se comienza a manifestar una atracción física hacia el otro sexo y puede surgir el enamoramiento. El inicio de la función reproductora.  Con la pubertad se inicia la función reproductora, que es la capacidad de originar nuevos individuos. La reproducción es posible si ocurre la fecundación. La fecundación consiste en la unión del óvulo y del espermatozoide para dar origen al cigoto, el cual se desarrolla hasta formar un nuevo ser. La fecundación puede ocurrir durante el acto sexual sólo si la mujer está en el período fértil, ya que el hombre siempre está en período fértil. La capacidad reproductora en la mujer se evidencia con la primera menstruación o menarquía. Cada mes el ovario puede producir un óvulo, el cual puede ser fecundado por un espermatozoide e implantado luego en el útero, para su posterior desarrollo en un nuevo ser vivo. Si el óvulo no es fecundado, se desintegra y es expulsado junto con las paredes del útero, produciéndose así el flujo sanguíneo, menstruación o regla, por tres a seis días. La capacidad reproductora en el hombre se evidencia con la primera eyaculación. La eyaculación es la expulsión del semen al exterior a través de la uretra. El semen contiene los espermatozoides que pueden fecundar al óvulo. http://www.clarionweb.es/5_curso/c_medio/cm504/cm50401.htm